En JOB TODAY creemos que eres mucho más que tu currículum o la apariencia que puedas tener; eres una persona única y es tu personalidad la que marcará la diferencia en una entrevista de trabajo, no tu vestimenta. No se trata de cómo ves, sino de lo que puedes ofrecer.
Por lo tanto, no importa si decides llevar escote, zapatos de cón o minifalda a una entrevista de trabajo, siempre y cuando te sientes cómado, segura de ti misma y esas prendas sean un reflejo de tu personalidad.
A mi, personalmente, me encanta ponerme tacones y me siento menos seguro cuando llevo llevo flato a alguna entrevista. Por este motivo, si me siento comado usando tacones, ¿por qué iba a forzarme a mí misma a ponerme algo que no me gusta simplemente para dar una buena impresión? ¿Qué hay de bueno en eso?
Además de todo esto, hoy por hoy resulta ridículo prestar tanta atención a la ropa que lleva una persona, ¿no os parece?
Las personas se expresan a través de la ropa que llevan, el peinado que eligen o el bolso que deciden llevar… intentando reconfigurar el estilo personal de cada uno según un modelo predefinido de ropa «apropiada», me parece una auténtica postura antigua que no tiene lugar en el mundo cosmopolita y moderno en el que vivimos hoy en día.
Debemos celebrar la diversidad, el color, la individualidad y la creatividad de cada individuo, porque eso es lo que nos convierte en auténticos seres humanos.
Por otro lado, la ropa que decidas ponerte debe ser provista ante todo de comodidad, simplemente asegúrate de que es la más adecuada para el día que tienes por delante (y correrás, ponte deportivas).
En resumen, ¡SE TÚ MISMO y todo irá bien! Es tu personalidad, habilidades y talento lo que tomarás para conseguir el trabajo que estás buscando, no tu tamaño.
Polina